¿Por qué tengo que volar el bosque?
A la mansedumbre le gusta el pasto corto…
Hace bastante ya que dejó de gustarme
lo no neutral, lo no natural.
Hasta la D marca que vamos por camino
incorrecto. Incorrectos.
¿Talar por bronca? ¿No ves que soy maíz real?
El que estás comiendo ha sido muy
modificado. Ya no tiene ni la figura original.
¿Por qué tanto odio?
El Odio como Motor.
En el fuego, esas llamas parecen iluminar
sombras de andá a saber qué camino…
El odio es el viento de las velas,
que hace rato ni se levantan.
Esas velas de las tormentas…
¿Una boca volcánica dormida?
Volcán que arrasó y donde la noche
es muy oscura.
Contraste profundos de la vida.
De vez en cuando un rayo en la tormenta,
brillante, alto cagazo,
ilumina ¿el camino que debo trazar?
¿combustible? ¿Potencia?
¿Chispa, quizás?
Un caballo que parece incansable,
pero de repente se rompe la calma.
Ahí llega al fin: muerte de paz.
El odio es semilla angustiosa.
Crece como árbol con raíces profundas.
¿Llegarán hasta la China?
Muy amargo.
¿Cómo es todo esto que encima
me dan fuerza?
Parece que envenenarse poco a poco
salvó Reyes y sus degustadores
entrenados para tolerar TODO.
La marcha NO ES RECTA.
Hay fuego en ese doble filo.
Es guía o cuchillo…
Esa furia puede terminarme.
Habrá que montarse otra vez
la ola bravas.
Reaparce la fuerza pero no me preguntes
desde dónde salió.
El odio es motor, es impulso.
Te enfrento mundito entero.
¿Creés que tengo miedo?
El odio, intenso, profundo,
es fuerza y cambios.
Lamento que no quieras verlo
Energía como y desafío
que no tengo ni interés en dominar.
Que sea.
Obstáculos, injusticias, siempre.
No mantendré el control ni voy
a influir. Que tenga vida carajo
que SEA.
FIN